Todos hemos pasado miedo en algún momento de nuestras vidas por una situación traumática de la que nos cuesta salir o afrontar y volver a la “vida normal” porque nos deja algunos síntomas o secuelas, muchas veces psicológicos. Cuando estos síntomas o secuelas empeoran, ya sea por semanas, meses o años, e interfieren en nuestro día a día es posible que estemos sufriendo un trastorno de estrés postraumático sin saberlo.
¿Qué es el TEPT?
El trastorno de estrés postraumático (TEPT) es un padecimiento relacionado con la salud mental que algunas personas desarrollan tras experimentar, presenciar o saber de algún evento traumático.
Se caracteriza por la aparición de síntomas específicos tras la exposición a un acontecimiento traumático. Por tanto, las personas con TEPT son aquellas que no se recuperan bien de ese sentimiento de miedo durante y después de una situación traumática.
Causas, tipología de afectados y factores de riesgo en el trastorno de estrés postraumático
La realidad es que todavía se desconoce por qué algunas personas tienen TEPT y otras no. Es algo que lo puede desarrollar cualquier persona y a cualquier edad. No obstante, hay distintos elementos que condicionan o que afectan tras sufrir un evento traumático.
En primer lugar, las mujeres tienen más probabilidades de desarrollar TEPT. Además, tener traumas en la infancia, estar expuesto a un gran estrés, la pérdida de un ser querido, tener antecedentes personales o familiares de enfermedades mentales, el consumo de sustancias, sentir mucha impotencia o miedo, son factores a tener muy en cuenta.
A nivel mundial, el país con mayor prevalencia anual de trastorno de estrés postraumático es Estados Unidos, en torno al 3,5%, mientras que en Europa, Asia y Sudamérica la prevalencia anual oscila entre el 0,5 y el 1%.
Lógicamente, el estrés postraumático es más frecuente en sectores o profesiones concretas como pueden ser militares, cuerpos de seguridad, bomberos o personal sanitario ya que tienen una profesión de riesgo y están expuestos a situaciones de mayor impacto. En este sentido, cabe destacar que los acontecimientos que producen una tasa más elevada de TEPT son violación, la guerra, cautiverio o prisión por causas étnicas o políticas.
Además, es importante tener en cuenta que los eventos traumáticos del TEPT se pueden experimentar y/o presenciar directamente o ser conocidos a través de la experiencia directa de un allegado.
Diferencias entre TEPT y TEA
En ocasiones, es posible confundir el TEPT con el TEA (trastorno de estrés agudo). La forma de diferenciarlos es su duración. Mientras que el estrés postraumático puede ser agudo o crónico, en función de si dura más o menos de tres meses, el TEA tiene una duración de tres días a un mes y, por lo general, los síntomas comienzan inmediatamente después del trauma. Por este motivo, muchos pacientes son diagnosticados en primer lugar de TEA y posteriormente, si los síntomas persisten más de un mes, el diagnóstico pasa a ser el de TEPT.
Síntomas del TEPT
Hay cuatro tipos de síntomas de TEPT, sin embargo pueden no ser los mismos para todas las personas ya que cada uno experimentamos las situaciones y los síntomas de forma particular y única. En cualquier caso, por lo general, los síntomas comienzan dentro de los tres meses posteriores al suceso traumático, pero a veces surgen más tarde.
Los cuatro tipos de síntomas, que suelen ser problemas en situaciones sociales o laborales y en las relaciones, son:
Recuerdos intrusivos
Tener recuerdos recurrentes, angustiantes e involuntarios del hecho traumático, revivirlo como si estuviera sucediendo, sueños perturbadores, etc.
Evasión
Evitar situaciones o personas que desencadenan recuerdos del suceso traumático.
Cambios en el pensamiento y en los estados de ánimo
Desesperanza, tener pensamientos negativos recurrentes o sentirse distanciado.
Cambios en las reacciones físicas y emocionales
También llamados síntomas de excitación, pueden ser trastornos del sueño, falta de concentración, asustarse o asombrarse fácilmente, estar en alerta continua, etc.
En definitiva, podemos decir que las personas con estrés postraumático tienden a sentirse deprimidas, con ansiedad, culpables, irascibles y/o susceptibles. También son comunes las pesadillas y flash-backs, hipervigilancia hacia cualquier peligro o cambio en su vida, tratar de evitar el trauma y dificultad para mantener relaciones sociales.
Cómo superar el trastorno de estrés postraumático
Si bien hay ciertos factores que pueden ayudar a reducir y prevenir el riesgo de desarrollar TEPT, como el apoyo familiar y de amigos, saber actuar y responder eficazmente sin sentir miedo, adoptar una estrategia clara para afrontar o superar el episodio traumático, etc., este tipo de trastorno puede llegar a nuestras vidas en cualquier momento.
Tras el diagnóstico clínico de un profesional de la salud, experto en ayudas a personas con enfermedades mentales, el siguiente paso es el tratamiento de TEPT, algo crucial para reducir los síntomas, mejorar el funcionamiento y superar el trastorno de estrés postraumático.
Las terapias más comunes para tratar el estrés postraumático suelen ser con medicamentos y tratamientos psicológicos específicos. A veces el experto se decanta por uno de los dos métodos o se combinan.
En el tratamiento con medicamentos, lo más frecuente es recomendar antidepresivos y ansiolíticos, siempre bajo la supervisión y terapia de un psiquiatra que controle progresión del paciente y evite o minimice los posibles efectos secundarios de los fármacos.
En Aila te ayudamos
En cuanto a la psicoterapia o terapia de conversación-diálogo, el objetivo es educar sobre los síntomas, enseñar a identificar qué los desencadena y cómo manejarlos, cambiar las emociones, pensamientos y comportamientos problemáticos. En este caso, hablamos de técnicas que llevamos a cabo en Aila Psicología tales como la terapia de exposición o la reestructuración cognitiva, entre otras.
Si has pasado por un suceso traumático recientemente, te recomendamos contar con el apoyo de un profesional experimentado en salud mental para encontrar el plan de tratamiento que aborde tus síntomas y ataje el problema de raíz.
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